Es hora de que los futuros periodistas sepan cómo trabajar con el código, como desarrollar una aplicación, como crear y diseñar. Asumiendo que se viene enseñando a los estudiantes de periodismo las técnicas del siglo pasado, es hora de innovar los planes de estudio realizando un cambio de 180 grados.
Pero, el aprendizaje de un software específico obliga a una formación continuada (Briggs, 2007). Nadie puede aprender narración digital en un semestre. Por ejemplo, el dominio de Dreamweaver, Flash o cualquier CMS[1], no es que sea complicado su aprendizaje, pero tampoco hay que pensar que se aprende de “prisa y corriendo” subestimando la magnitud del conocimiento de este tipo de aplicaciones, por lo que incluir su aprendizaje en un curso de periodismo online o ciberperiodismo, como materia optativa puede hacer más daño que bien. Esto significa que debemos estar enseñando código en todos los cursos del grado de Periodismo (cada semestre, cada año, hasta su graduación).
La oferta de trabajos para diseñadores y periodistas que saben escribir código está creciendo exponencialmente. Por tanto, vamos a coger “el toro por los cuernos” o, lo que es lo mismo, devorar la lectura de la obra “El arte de la guerra” y atacar el problema de la (mala) formación desde todos los ángulos. Dicho en roman paladino: Tenemos que enseñar a los estudiantes a ser más tecnológicamente alfabetizados. Tenemos que enseñarles cómo aprender y cómo errar. Porque no es lo mismo ser nativo digital que alfabeto digital. Esto no significa que los redactores o editores individuales de sus contenidos en blogs o páginas web, que han aprendido un poco de programación deben terminar por convertirse en un ingeniero de software o un diseñador web. Obviamente, no. Tampoco el objetivo final es la fluidez en la programación de software. Sin embargo, hay un valor añadido en la comprensión de cómo los navegadores leen y procesan nuestras historias.
Por ello, a la cobertura periodística y redacción de una historia, se suman, el escribir algo de código (HTML, CSS, Javascript) y la programación de aplicaciones y servicios complejos, lo que convierte al periodista profesional en un perfil con toda una colección de habilidades.
[1] CMS es el acrónimo de Content Management System (Sistema de Gestión de Contenidos)