Hiperlocalismo en las calles de San Francisco (Parte 3) La Entrevista

3 de julio de 2014. Visita a la sede del periódico Mission Local, en la Ciudad de San Francisco y entrevista a Andrea Valencia,  editora adjunta y traductora de dicho periódico.

Andrea Valencia Mission Local

Jesús Flores: Agradezco tu disposición a recibirme y a las gestiones hechas por Lydia Chávez. Hablemos de Mission Local, el modelo periodístico que me ha traído hasta aquí.

Andrea Valencia: Mission Local es un periódico local con cinco años de existencia, fundado por Lydia Chávez, durante muchos años periodista y actual profesora investigadora  de la Escuela de Periodismo de la Universidad de California Berkeley. ML nació como  parte de un programa de la Maestría de dicha escuela en donde Lydia imparte docencia, también desde hace algunas décadas. Mission Local se basa en un modelo de periodismo hiperlocal, potenciado por el uso de las tecnologías de la información e Internet.

J.F.: ¿Quiere decir que Mission Local es  un periódico que depende de la universidad?

A.V.: En los primeros años Mission Local era un proyecto patrocinado por la propia Escuela de Periodismo de la UC Berkeley, puesto que Lydia es profesora allí. De esta forma, el periódico era hecho por estudiantes de la maestría de la universidad. Incluso, estudiantes de postrado que realizaban su licenciatura, maestría o doctorado en otras universidades. En ese sentido, ML se tomaba como una materia (asignatura) práctica durante todo un semestre y con grupos de estudiantes cuyo número máximo era de 15. Desde su fundación, Misión Local, era -y es-  un lugar abierto para todos/as. La editora en jefe siempre ha sido Lydia, aunque cuando ella  tiene otros compromisos laborales o no laborales, utilizamos el plazo como oportunidad para capacitar a periodistas que necesitan o quieren adquirir experiencia manejando un periódico, no obstante Lydia está disponible remotamente siempre, quien, si tiene que elogiar (felicitar) por el trabajo realizado lo hace, pero si tiene que regañar (llamar la atención) a alguno/a que no esté haciendo bien el trabajo también lo hace.  Es decir, se realiza un trabajo como se estila en cualquier redacción profesional. En esencia, eso se mantiene, pero ha habido cambios respecto a la dependencia. Recientemente, Mission local ha empezado su andadura de forma autónoma, es decir, sin patrocinio y apoyo de la universidad.Mission Local

J.F.: Has comentado que se trabaja de una forma como se hace en una redacción profesional de un periódico convencional. Bien, de cara a las personas que se encargan de la confección, edición y creación de contenidos de Mission Local ¿significa que estas personas obtienen algún salario o reciben alguna compensación económica por el trabajo realizado? En otras palabras ¿cobran por el trabajo hecho como en cualquier redacción?

A.V.: Si, la mayoría de los que estamos en Mission Local (alrededor de ocho personas- dos en plantilla y cinco-seis freelancers) cobramos por el trabajo que hacemos. Es verdad que el pago recibido es una cantidad  que se tiene que compaginar con otros trabajos que produzcan otras entradas, pero, sí se retribuye a los que trabajan el día a día en la redacción. Aunque no es el caso para los contribuidores (colaboradores) que apoyan los contenidos que se hacen para el periódico.

J.F.: ¿Por qué el periódico está en un lugar que no es ni mucho menos el centro financiero de la ciudad?

A.V.: En el distrito de La Mission hay aproximadamente 60.000 personas. Eso hace interesante a los objetivos del periódico. Además, está el sentido de servicio a la comunidad. Creemos que Mission Local puede contribuir al crecimiento y prosperidad de este distrito de San Francisco. Además no tendría sentido cubrir un área en la que no tenemos oficina (sede).

J.F.: ¿Mission local es un producto exclusivo de Internet?

A.V.: No, siempre se ha ido compaginado la publicación en Internet con una edición impresa bilingüe, no obstante la edición impresa sale solo 4 veces al año pero en el sitio publicamos todos los días, varias veces al día.Mission Local Jesus Flores

J.F.: Y entonces, como en cualquier periódico profesional ¿incluís la publicidad como una entrada más?

A.V.: Sí, incluimos publicidad tanto en el formato impreso como en el digital. Ofrecemos incentivos de publicidad en línea a los negocios a que se anuncien en papel, y viceversa puesto que cada vez que imprimimos  es una cantidad amplia que conviene a los negocios  en términos de alcance al público.

J.F.: Mission Local ¿es el único periódico del distrito en este formato, tanto en internet como de tipo hiperlocalista?

A.V: Mission Local no es el único en el ecosistema de periódicos en el Distrito. Tiene su contraparte que se llama El Tecolote (eltecolote.org). Mission Local ha colaborado con ese medio en distintas ocasiones y existe entre ambos una buena relación y no de competitividad. Nosotros hemos colaborado en varias ocasiones, por ejemplo, en la edición impresa de ellos tuvimos un encarte y algunos de sus periodistas colaboran con nosotros y viceversa. Cuidamos no promover la competitividad percibida propia de las empresas de medios porque creo que promueve valores morales capitalistas y nosotros lo que queremos es aportar a la comunidad y, ciertamente, existe una comunidad periodística muy vasta y diversa en todo San Francisco, tanto así que casi todos los barrios de la ciudad tienen su propio periódico. El Tecolote lleva más años de creación siendo el periódico bilingüe más antiguo del Área de Bahía. Su influencia abarca a gran parte de la población, sobre todo por la valoración que tiene de ser un periódico que se construye con el esfuerzo, en su mayoría, de voluntarios.

 

J.F.: ¿Qué nos puedes decir acerca del día a día en la redacción?

A.V: En la redacción actual de Mission Local, este verano específicamente, tenemos dos internos de Stanford con estudios no relacionados al periodismo para adquirir práctica en el periodismo, otros medios. Ellos son Joe Rivano Barros y Leslie Nguyen. De planta más o menos tenemos un periodista y contribuidor (colaborador), residente de la Misión, Dan Hirsch, quien funge este mes como editor adjunto; una exalumna de la JSchool de UC Berkeley, actualmente una Knight fellow, Keli Dailey, como editora adjunta y periodista; la persona de negocios y difusión en la comunidad Ana Aguilar; asi mismo, Laura Wenus, quien estudió radioperiodismo en Nueva York y está como reportera, y además tenemos algunos contribuidores (colaboradores) de la comunidad y alumnos de preparatoria que nos asisten durante el verano con otras tareas de administración y cuidado del archivo del sitio. Como he dicho, el periódico pasa de ser un modelo comunitario a un modelo hiperlocal. El horario que tiene para sus redactores es un poco flexible, de tal forma que cada uno/a pueden adaptar su disponibilidad de trabajo. Pero, una vez asumido el compromiso de trabajar en el diario, han de cumplir con el día a día. Por otro lado, el perfil de estudiantes de periodismo que deseen entrar en Mission Local, es un perfil que se basa en la aportación y ejecución de ideas. Mission Local necesita gente con ideas que pueda ejecutarlas. Y, además, fomenta el periodismo móvil, con el uso de los diferentes dispositivos móviles que los periodistas poseen (PC, laptops –portátiles-, tabletas, smartphones).Mission Local

J.F.: ¿Qué aporta Mission Local al estudiante que colabora o al que trabaja diariamente acudiendo a la redacción?

A.V.: Ofrecemos a los estudiantes un lugar donde pueden formarse como periodistas, donde pueden adquirir nuevas habilidades que el periodista de hoy  necesita tener, como saber tomar fotos, video y editarlo, y escribir y editar, así como manejar las redes sociales. Les ofrecemos una plataforma viviente, con un público real, no un salón de clases inerte. Además. Mission Local ha establecido alianzas con empresas tecnológicas radicadas en San Francisco. Esta son compañías que buscan hacer alianzas con redacciones para poder probar productos que pueden tener otras funcionalidades. Por ejemplo, en cierta ocasión contactaron con nosotros, los representantes de Scribblelive (para que consideráramos pagar una cuota por el servicio. Y nos daban la opción de probarlo previamente para ver si nos convenía). Esto sirvió para que los reporteros del periódico usaran la aplicación de transmisión en vivo, cuando hay noticias de último momento (por ejemplo, su uso en protestas). Esto convierte a los reporteros de Mission Local en una especie de evaluadores (testeadores) de aplicaciones. Luego, los estudiantes pueden poner en sus curriculum que han utilizado tal o cual herramienta, tal o cual aplicación. Pero, independientemente de ponerlo en el curriculum, les obliga a que si algo no funciona tienen que idear alguna manera para tener la nota, el artículo a toda costa. Y eso es algo muy bueno que un periodista pueda aprender, a depender de su ingenio e inteligencia.

J.F. Y sobre la calidad de los contenidos, sobre los valores éticos de la información….

A.V.: Para cuestiones éticas, el modelo hiperlocal que desarrolla Mission Local es el mejor entorno para generar una ética dado que se hace desde la práctica. Es decir, aprender la ética practicando con la creación de contenidos, bajo una filosofía de “eso que has hecho no está bien. Mira el perjuicio que has ocasionado”. En este sentido, es el mejor entorno porque uno sabe que hay un público real que lee las notas y comenta. Entonces, primero la nota (o información) se discute en la redacción, después se intenta tomar en cuenta a todas las partes, pero siempre habrá algo dicho o hecho que no se sienta bien con alguien en el público, en todo caso lo señalan y el periodista se da cuenta de la incidencia que puede tener. No se trata de cometer posibles errores y luego no volverlos a hacer por el perjuicio hecho. Tampoco se trata de evitar el perjuicio a toda costa, sino que se trata de tomar en cuenta la diversa opinión pública a pesar del perjuicio que pueda haber -uno intenta tomar a todas las partes en cuenta- para que sea el lector el que haga un juicio. Sin embargo, cuando alguien (del publico lector) siente que su punto de vista no está incluido, sí el periodista se da cuenta del perjuicio que ha causado, entonces puede incluirlo, ya que es un entorno que propicia la inmediatez sobretodo en cuestiones éticas, a diferencia del aula en la que se plantean ejemplos o se analizan situaciones que ya han sucedido. Las cuestiones éticas se tratan también de cómo uno actúa cuando se encuentra en un brete (encrucijada).

J.F.: Has hablado de Mission Local como modelo periodístico que aporta una experiencia fundamentalmente a los estudiantes. Pero ¿Qué aporta a la comunidad, al distrito?

A.V.: Mucho. En primer lugar, lo que aporta Mission Local es que es un centro de capacitación para periodistas profesionales y principiantes y gente que desea incursionar en el mundo del periodismo. Y al mismo tiempo es un periódico profesional. Entonces, las puertas están abiertas a la comunidad que cubrimos porque es una entidad viviente que necesita seguir creciendo y evolucionando, y la redacción ofrece un lugar con un entorno intelectual diferente al del día a día. Además, aceptamos a gente de todo tipo de contexto y con todo tipo de habilidades. En realidad, depende de la gente que viene si se quedan o se van. No se puede decir lo mismo de muchos otros lugares… Buscamos enriquecer a la persona en sí misma a través del medio periodístico. Tenemos además productos accesibles a la comunidad, como un guía impresa del distrito de la Misión, un atlas basado en el último censo con diferentes yuxtaposiciones que existen en el barrio para evidenciar los cambios y hablar de ellos, playeras, por supuesto, para que la gente vista el nombre del periódico con orgullo, una aplicación gratuita para iPhone que se llama Mission Tour, otra para leer las noticias y además una interfaz de diseño de repuesta (responsive design) para acceder desde cualquier dispositivo a las noticias. Además, todo es bilingüe para que la gente tenga la opción de leerlo en español o en ingles, sí así lo desean. Ofrecemos un listado diario de trabajos, oportunidad de contribuir con fotografías…. bueno, muchas cosas más que andamos planeando y manteniendo.

Nota del autor: He descargado la aplicación (que es gratuita) en el iPad (también dispone de versión para iPhone) y he navegado por su interfaz y realmente es un recurso fantástico que da valor añadido a Mission Local que lo posiciona como proyecto vanguardista e innovador, prestando un gran servicio no sólo a la comunidad, sino, además, a la gente que no vive en el distrito, puesto que aporta gran cantidad de información utilizando un formato que se viene introduciendo en las cabeceras de grandes medios.

Este artículo forma parte de la investigación “Estudio y experimentación de nuevos medios para la consolidación del periodismo en línea”, que se lleva a cabo en el Center for Sciencie and Innovation Studies de la University of California Davis  © Jesús Miguel Flores Vivar.  

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